La nueva Xbox Series X, llega con mucha potencia y una gran velocidad. El hardware bruto de la Xbox Series X se complementa con un software flexible, adaptable y potente que utiliza de manera inteligente la fuerza bruta del sistema. El sofisticado SoC de AMD a 7nm de la consola, el SSD PCIe 4.0 y el uso de memoria GDDR6 por parte de la GPU, se mantienen unidos por una sofisticada pila de software que permite a los desarrolladores aprovechar la bestial tarejta integrada, al tiempo que ofrece efectos como el sombreado de velocidad variable o el trazado de rayos, aumentando las velocidades de cuadros y la inmersión en el proceso.
Una gran parte de este énfasis en la velocidad es la nueva funcionalidad mejorada de reanudación rápida de la consola. Esta característica te permite básicamente convertir cualquier sesión de reproducción en un estado de guardado que se conserva incluso después de apagar la consola. Xbox Series X te permite pausar varios juegos a la vez y volver a ellos en cualquier momento sin tener que cargar nada. Es algo así como Netflix y Hulu guardan tu lugar cuando dejas de mirar.
«La nueva función Quick Resume te permite continuar múltiples juegos desde un estado suspendido casi instantáneamente, regresándote a donde estabas y a lo que estabas haciendo, sin esperar a través de largas pantallas de carga», escribió Microsoft en su blog.
Esta es una característica revolucionaria porque reduce aún más uno de los principales puntos de fricción entre los consumidores y los juegos: la espera.
El Quick Resume de Xbox Series X ofrece una conveniencia expresa, una que convierte su máquina en un verdadero centro de comando que te brinda más control sobre los juegos que juega y la rapidez con la que se puede acceder y reanudar el juego.
Fuente: Tweaktown