La guerra comercial entre Estados Unidos y China está en pleno apogeo. Aunque el presidente Donald Trump prometió que los productos de Apple no se verán afectados por los aranceles, sugirió lo contrario antes de su cumbre con el líder chino Xi Jinping, programada para este fin de semana.
Según The Wall Street Journal, si las negociaciones no producen un resultado favorable para los EE. UU., Los productos adicionales por 200 mil millones de dólares obtendrían un 25% de aranceles, incluidos los productos electrónicos de consumo de Apple y otros productos fabricados en China.
Si bien a la Administración de Trump le preocupa la reacción de los consumidores, Donald Trump sugirió que un aumento del 10% en el precio no cambiará mucho y «la gente podría soportar eso muy fácilmente».
Este problema está haciendo que Apple vea con buenos ojos trasladar la fabricación de sus productos a Taiwán o Vietnam, en donde los aranceles no se aplican.
Fuente: GSMArena